La imagen de los empleados de cualquier tipo de empresa, es fundamental no sólo para la captación de potenciales clientes y aliados comerciales, sino también para que ese equipo humano se sienta parte de una comunidad que lo respalda y lo apoya. Una de las formas de hacer sentir al empleado como algo más que un simple trabajador, es con los uniformes laborales.
Elegir los uniformes laborales no es difícil ni imposible, sin embargo, necesitan de una toma de decisiones acertada y de un pensamiento que involucre a todos los actores que hacen vida en la empresa, pues hay que pensar que cada puesto laboral es distinto y por ende, tiene necesidades diferentes, pero que aún así, deben tener una línea que unifique a todo el equipo humano, para que sean fácilmente reconocibles por los clientes, aliados comerciales y supervisores estatales, entre otros.
La toma de decisiones que va de la mano con la implementación de uniformes laborales, no debe ser por parte de la directiva, es un proceso en la que todos los equipos de empleados tengan voz, voto y que sus sugerencias sean escuchadas, pues nadie conoce mejor su puesto laboral, que ellos mismos. Un ejemplo de eso es el tipo de uniforme que necesitaría un trabajador de almacén y el tipo de uniforme que necesita el encargado de la recepción.
Ambos necesitan un uniforme, pero no puede ser el mismo, pues las necesidades propias del encargado de la recepción no son las mismas que las del trabajador del almacén, pues este último necesitará ropa de seguridad para evitar daños en caso de accidentes, y ese material no lo necesita una persona que está directamente relacionada con la atención al público, por ello es tan necesario que lo primero que se haga ante la posibilidad de unificar criterios de vestimenta, sea la opinión de aquellos que portarán el uniforme.
Luego de hacer esto, viene la elección de materiales. Estos deben adaptarse a las necesidades y que le permitan a todos los empleados cumplir con sus funciones de forma cómoda, supongamos que la empresa es una de distribución de alimentos congelados, los encargados de almacén deben contar con una vestimenta que los proteja de las bajas temperaturas que tienen los congeladores industriales, desde los zapatos, hasta los gorros y guantes, pues la empresa está legalmente obligada a velar por la seguridad de sus empleados, ahora bien, si seguimos este ejemplo, el community manager de esa empresa de alimentos, no necesita todo el uniforme de seguridad, pues su trabajo no implica actividades dentro de los almacenes, por lo que los materiales de su uniforme, deben ser diferentes.
Teniendo la elección de los materiales de los uniformes, viene la decisión de cómo se va a identificar a la compañía, es decir, de qué manera se mostrará el logo para que sea fácilmente reconocible y duradero, pues lo ideal es que los uniformes sean utilizados a largo plazo y de forma constante.
Existen muchas opciones para colocar el logo de una compañía en los uniformes laborales, sin embargo, nuestros amigos de Bordamar, nos recomiendan elegir el bordado, como la mejor forma de identificarlos, y es de eso de lo que hablaremos a continuación.
El bordado
Cuando hablamos del bordado, pensamos en un trabajo manual y un poco más artesanal, sin embargo, para el caso particular de la identificación de uniformes laborales con la identidad corporativa de una empresa, el bordado manual no es una opción, pues no sólo se trata de la cantidad de uniformes a llevar a cabo, sino de que no se pierdan los detalles importantes del logo, para que sea reconocible sin problemas.
Para este caso particular, se necesita una maquinaria de bordado industrial, que por medio de hebras textiles o hilos de bordar, plasma la imagen en una superficie flexible. Hoy en día el bordado textil permite desarrollar su imagen corporativa en tipos diferentes de prendas textiles; prácticamente no tiene limitaciones, permite realizar personalizaciones sobre cualquier bordado, ofrece una gran durabilidad y al ser más duradero, los gastos por reposición de piezas, son mucho menores.
En prendas como polos, camisas, polares, chaquetas, gorras, el bordado textil es un valor añadido a la prenda, lo que le dará una mejor imagen al personal ante el público, ahora bien, hay que entender que no todos los tipos de material se pueden bordar, pero que en su mayoría puede hacerse sin problemas, otro aspecto importante a la hora de considerar el bordado para los uniformes laborales, es el tipo de hilo a utilizar.
El hilo
Existen muchos tipos de hilo que sirven para propósitos diferentes, en este caso, el hilo de bordar es uno de los componentes más importantes en la elaboración del bordado industrial, la tecnología también ha entrado en el mundo textil y ha desarrollado fibras y colores que hacen de esta forma de bordado, una que permite mucha libertad creativa.
Para el bordado textil a nivel industrial es necesario utilizar dos tipos de hilo: el principal que se verá en el bordado, podríamos llamarlo hilo externo, y el hilo secundario, el de bobina o de trama; que fijará los puntos. Ambos son igual de importantes, en ambos casos podemos hablar de los siguientes hilos:
- Hilo de Algodón: Es un hilo resistente que se puede usar en todo tipo de máquinas. Se puede lavar a altas temperaturas, así como plancharlo con instrumental profesional y es muy resistente.
- Hilo de Poliéster: Es de filamento continuo. Resiste muy bien a temperaturas extremas, exposiciones al sol, lavados con blanqueador o lejía o productos de limpieza fuertes, el agua salada, por lo que es recomendable usarlo en prendas que puedan estar a la intemperie, como toallas o telas utilizadas en mobiliario de exteriores.
- Hilo de Poliamida o Nylon: Es una de las últimas novedades tecnológicas en el bordado industrial, este hilo reúne las mejores cualidades del poliéster: excelente brillo, resistente a lavados fuertes, blanqueador, intemperie, etc. Este tipo de hilo destaca por su gran suavidad (es bastante utilizado en ropa interior) y los colores son más sólidos y estables que en otras fibras.
- Hilo Metalizado: Los hilos de tipo metalizado son bastante especiales, delicados y son complejos de usar por su elasticidad y por el propio material, que se calienta con la fricción y hace que se rompa con más facilidad, además de realizar un mayor desgaste a las maquinas bordadoras.
Ventajas del bordado en los uniformes laborales
En los apartados anteriores, hemos hablado de las características técnicas de por qué elegir el bordado para los bordados laborales, a continuación explicaremos las ventajas a nivel general que tiene esta opción:
- Durabilidad: Si las piezas del uniforme son tratadas con los debidos cuidados a la hora de lavado, secado y planchado, el bordado puede considerarse de duración ilimitada. El desgaste dependerá de cómo se lleve a cabo el proceso de higienización de las prendas, utilizando los productos indicados. Lo más recomendable es que las piezas sean lavadas al revés, no planchar sobre el bordado, ni dejarlas expuestas durante un largo periodo al sol, no solamente por el maltrato al tejido, sino porque puede llegar a debilitar todos los componentes de la pieza.
- Menor tiempo de espera del producto: Cuando se elige esta opción para personalizar los uniformes laborales, el tiempo de espera para la entrega del mismo es menor gracias a la tecnología utilizada para el bordado actual.
- Profesionalidad: La técnica del bordado se diferencia de otras porque a nivel visual se ve mucho más pulcro y cuidado; lo que hace que la visibilidad del logo de tu empresa se vea muy profesional.
- Publicidad andante: Las prendas bordadas utilizadas por la plantilla de empleados de la empresa, son publicidad andante, y si al logo se le agrega información de contacto como usuarios de Twitter, Instagram o el url de la página web, es más fácil captar clientes potenciales.
- Diferencia tu empresa de las demás: Hay empresas que no le dan suficiente importancia al marketing que significa personalizar los uniformes laborales, hacerlo diferenciará tu negocio de los demás, y lo hará mediante la memoria de los clientes si se logra crear una imagen corporativa llamativa y que represente el servicio que ofrece.
- Genera confianza en clientes y aliados comerciales: Un cliente o aliado comercial confía más en un empleado que lleve un uniforme que lo identifique como trabajador de una empresa, que en uno que no tenga ningún tipo de identificación. Los uniformes hacen reconocibles a los empleados en cualquier ambiente y los clientes y aliados comerciales, pueden recurrir a ellos ante cualquier eventualidad.
Elegir un bordado para la personalización de los uniformes laborales, puede ser la mejor de las elecciones cuando se trata de darle a nuestra empresa una imagen ante al público, pero que además también nos garantizará una inversión económica que será rentable y duradera, pues si se eligen materiales de buena calidad y se realiza un buen bordado, los uniformes pueden durar mucho tiempo, generando menos gastos y mucha más seguridad para los empleados y confianza en los clientes y aliados comerciales.